Durante los primeros años de vida, el niño muestra una serie de cambios
físicos, psicológicos y sociales, la mayoría de estos son visibles y de fácil
reconocimiento, otros pasan desapercibidos o no los notamos inmediatamente, me
refiero a los cambios en su forma de pensar, las imágenes mentales que va
creando y las asociaciones o tipos de vínculos sociales que establece. Entonces,
si no nos damos cuenta de estos cambios, ¿cómo podemos ayudar a nuestros hijos
a forjar su personalidad?
Para entender este proceso, recordemos que la personalidad tiene dos
componentes: el temperamento y el carácter, el primero consta de rasgos
heredados como la emotividad, el nivel de actividad y la sociabilidad; el
segundo se refiere a las características que se van aprendiendo y van cambiando
con la influencia del medio que le rodea al niño, en este último punto
interviene la familia de manera muy directa y decisiva.
¿Hasta qué punto puede influir la familia en el
desarrollo de la personalidad?
La familia es un sistema de participación unida por vínculos afectivos,
imaginemos a este grupo de personas como un sistema de engranajes, cada miembro
de la familia es una pieza importante para que todo el conjunto funcione, las
piezas se encuentran unidas y cada movimiento que hacen mueve a los demás; constantemente
se hacen ajustes y reajustes en la conducta de cada miembro, a raíz de esto,
pueden haber periodos de equilibrio y de inestabilidad en la familia, se
presentan un sinfín de conductas que afecta a los otros miembros, de manera
positiva o negativa.
Así es como intervienen las actitudes, palabras, reacciones y acciones, de
forma directa en el aprendizaje social del niño, en su autopercepción,
autoconcepto y las características de personalidad que se irán moldeando
durante los primeros años. Recordemos que el niño llega a este mundo a
aprender, por eso cada palabra y acción deben ser pensadas como unas huellas
que quedarán en su ser, que si bien pueden ir modificándose con el paso del
tiempo, muchas de ellas llegan a ser un factor definitivo en las dificultades
que tenemos como adultos.
Lic. Mayra A. Angulo A.
Psicóloga educativa
Que importante es conocer el impacto que pueden tener las palabras que se dicen en un momento de estres, rabia, preocupacion, etc. A veces como mamá o papá, creemos que no se dan cuenta y sin querer podemos cambiar su caracter y muchas veces es para siempre. Muy buen articulo, breve y claro.
ResponderEliminarMuchas gracias por su comentario, esperamos seguir contribuyendo a sus conocimientos y sobretodo aportar a la formación de sus hijos.
EliminarGracias mayis.. me hiciste notar lo importante que es cada cosa que se hace o dice al niño ya sea en buenos o malos momentos... tenemos que tomar conciencia... mi bb es muy temperamental quiero ayudarlo con eso..
ResponderEliminarGracias por leerlo, me alegra mucho que la información sea útil :) Espero seguir contribuyendo con los siguientes artículos.
EliminarMuy cierto lo que mencionan, ya lo habia olvidado y es necesario recordar que los bebes perciben todo lo que les rodea, desde ambientes toxicos hasta ambientes llenos de amor. Gracias por esta importante informacion. Trabajare esto con mi bb.
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